La subida de la leche o lactogénesis II es un proceso que ocurre tras el nacimiento de vuestro hij@.
Ocurre por el cambio hormonal que sucede tras el parto (tras la expulsión de la placenta), y consiste en un aumento de la producción de casi todos los componentes de la leche.
Este aumento brusco de síntesis de leche puede provocar que las mamas aumenten de tamaño, estén calientes y/o duelan.
No todas las mujeres muestran esta sintomatología, lo cual no quiere decir que no tengan leche suficiente para poder lactar (amamantar a su hijo).
Es decir, que el que se tengan más o menos síntomas, no está relacionado con la mayor o menor producción de leche posteriormente.
Para aliviar los síntomas de ingurgitación mamaria existen diversas técnicas como la aplicación de frio-calor, realización de masajes, etc.
Sucede tanto si ha sido parto vaginal como por cesárea, pudiéndose dar más tarde en ésta última por varios factores (retraso en la síntesis de oxitocina, estrés materno si la cesárea es por una urgencia, retraso en el inicio del amamantamiento por permanecer la madre en reanimación durante unas horas).
Suele ocurrir con mayor frecuencia entre las 48 y 72 horas tras el parto, pero hay mujeres que pueden notarla después de las 72 horas postparto y es completamente normal.
Hasta la subida de la leche, las necesidades de ingesta del recién nacido están cubiertas por el calostro. El calostro se forma durante el embarazo, por lo que cuando nace el niño ya está presente en las mamas.
Según la asociación española de pediatría: "El contacto precoz de la piel de la madre con la piel del hijo, el inicio del amamantamiento en la primera hora tras el parto, el amamantamiento frecuente y un buen acoplamiento boca-pecho se traduce en mejores índices de lactancia, tanto a corto como a largo plazo".
Hay situaciones en las que se retrasa la subida de la leche, y en esas situaciones el abandono de la lactancia aumenta, pues las madres suelen creer que no tendrán leche suficiente para alimentar correctamente a sus bebes. Este convencimiento puede verse alentado por una mayor pérdida de peso del recién nacido. Por ello es importantísimo el apoyo por parte de un profesional hasta que la lactancia esté bien instaurada.